miércoles, 20 de febrero de 2013

Declaración de ausencia, por la paciencia


Os procuro armonía, os procuro un pedazo de mí. 
Sugiero una mirada tardía, un despliegue de batallas y de juegos, de proyectos, necedades y quizá algún acierto. 
No hay mentiras sin perdón. Pues aunque la espera es larga y nada es fácil. Si pensamos que es difícil. 

Comienzo desgranando lo que comenzó un día, una idea.
¿Cómo puede ser un momento tan lujoso? Como no, eterno puede durar un segundo, o lo que dura una canción, un latido, un corazón, una palabra.

Aliento siento y regalo inquietudes, pues me basto. Y reconozco, ¡te preciso!

Si, emanada estoy, obcecada, enfrascada, estoy, la cabeza azucarada, el corazón engalanado y mi alma en un renglón.
Os vaticino un gran encuentro.